Vuelvo a presentaros un par de dibujitos de mis caprichos XIII con nuevos soldaditos de plomo.
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Antes, quiero dedicar esta página a Suzanne McDermott, que con su comentario me abrió el interés por buscar la página de "el país de la colcha" de Robert Louis Stevenson. Autor de poemas entre el que se encuentra éste que os cito.
Suzanne, pintora americana que vive en la zona de Florida y como sabéis está pasando un mal momento a causa de la marea negra que está invadiendo el golfo de Mejico, al ver mis soldaditos de plomo le recordó el poema y me lo hizo conocer.
ROBERT LOUIS STEVENSON: "el país de la colcha"
Este escritor nacido en Edimburgo, Escocia 1850-1894, escribió poemas para niños, aparte que fué el creador de la novela "la isla del tesoro" mundialmente conocido.
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El país de la colcha.
Cuando estaba enfermo y guardaba cama,
En dos almohadones grandes me apoyaba
Y tenía a mano todos mis juguetes
Para que estuviese contento y alegre.
Y algunas veces por una hora, o así
Observaba a mis soldados de plomo marchar
Con diferentes uniformes e instrucción
Entre las mantas, a través de las montañas.
Y algunas veces mandaba mis barcos en flotas
Arriba y abajo entre sábanas
O sacaba mis árboles y mis casas
Y plantaba ciudades alrededor.
Yo era el gigante grande y tranquilo
Que se sienta sobre la Almohada/colina.
Y ve delante de él los valles y las llanuras.
El agradable país de la colcha.
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Stevenson, de niño, pasó grandes temporadas en cama debido a sus enfermedades. "El país de la colcha" es uno de los mejores poemas, de ese libro.
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Ilustración por la célebre pintora Jessie Willcox Smith.
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Gracias Suzanne!
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En Mis caprichos XIII, presento el resto de soldaditos de plomo que tengo por casa en una librería y que protegen unos libros antiguos
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Más soldaditos de plomo.
Aquí tenemos, de nuevo y a pié, a Napoleón, oteando el horizonte, contempland sus campos de batalla y guardado por un soldado que debe pertenecer a la infantería de no sé qué ejército.
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Cuaderno de viaje. Rotulador negro, rotulador de acuarela y pluma.
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Antes, quiero dedicar esta página a Suzanne McDermott, que con su comentario me abrió el interés por buscar la página de "el país de la colcha" de Robert Louis Stevenson. Autor de poemas entre el que se encuentra éste que os cito.
Suzanne, pintora americana que vive en la zona de Florida y como sabéis está pasando un mal momento a causa de la marea negra que está invadiendo el golfo de Mejico, al ver mis soldaditos de plomo le recordó el poema y me lo hizo conocer.
ROBERT LOUIS STEVENSON: "el país de la colcha"
Este escritor nacido en Edimburgo, Escocia 1850-1894, escribió poemas para niños, aparte que fué el creador de la novela "la isla del tesoro" mundialmente conocido.
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El país de la colcha.
Cuando estaba enfermo y guardaba cama,
En dos almohadones grandes me apoyaba
Y tenía a mano todos mis juguetes
Para que estuviese contento y alegre.
Y algunas veces por una hora, o así
Observaba a mis soldados de plomo marchar
Con diferentes uniformes e instrucción
Entre las mantas, a través de las montañas.
Y algunas veces mandaba mis barcos en flotas
Arriba y abajo entre sábanas
O sacaba mis árboles y mis casas
Y plantaba ciudades alrededor.
Yo era el gigante grande y tranquilo
Que se sienta sobre la Almohada/colina.
Y ve delante de él los valles y las llanuras.
El agradable país de la colcha.
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Stevenson, de niño, pasó grandes temporadas en cama debido a sus enfermedades. "El país de la colcha" es uno de los mejores poemas, de ese libro.
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Ilustración por la célebre pintora Jessie Willcox Smith.-
Gracias Suzanne!
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En Mis caprichos XIII, presento el resto de soldaditos de plomo que tengo por casa en una librería y que protegen unos libros antiguos
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-Más soldaditos de plomo.
Aquí tenemos, de nuevo y a pié, a Napoleón, oteando el horizonte, contempland sus campos de batalla y guardado por un soldado que debe pertenecer a la infantería de no sé qué ejército.
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Cuaderno de viaje. Rotulador negro, rotulador de acuarela y pluma.
Ah, l'île au trésor, c'est vraiment un excellent livre !
ResponderEliminarCe petit Napoléon est tout à fait amusant avec sa longue vue et il n'a pas la main sur son estomac !
Merci à Suzanne pour t'avoir inspiré cette jolie page.
Superbe l'illustration de Jessie Willcox Smith. J'aime beaucoup aussi celle de poissons... Bises.
ResponderEliminarMerci Olivia, C’est justement grâce a Suzanne que j’avait découverte l’illustration des poissons, que je t’avais envoyé.
ResponderEliminarC’est très mignon l’histoire des soldats de plombe...
Bises.
Poema bonito y muy bien traido al tema de tus dibujos de hoy.
ResponderEliminarNapoleón está que se sale, mirando por el catalejo, como tú bien dices parece que va a dar la orden de ataque, le has sabido coger muy bien el aire, se nota que no es la primera vez que lo miras.
Feliz semana!
Muchas gracias Joshemari. Siempre sorprendente..., y con tus buenos dibujos y bocetos.
ResponderEliminarSe cuide mucho amigo.
Javier.
Fantastica entrada, llena de ternura y sensibilidad
ResponderEliminarGracias correcaminos, es un poema que encaja con el espíritu infantil que todos llevamos dentro y con ese despliegue de dibujos que llamo "caprichos" y especialmente con este de los soldaditos de plomo.
ResponderEliminarEs tan tierno el poema que lo quise poner.
Me queda algún soldadito más todavía, pero ya no son relevantes.
Napoleón ha sido un grandísimo personaje en la historia!
Un fuerte abrazo.
Gracias Mateo, tu también, siempre amable.
Me alegro que te hayan gustado.
Un abrazo.
Gracias amigo Lara, me doy cuenta que tú también tienes ternura y sensibilidad, en tus manifestaciones...aún recuerdo aquellas acuarelas que me dedicaste...
Un abrazo.
Son unos excelentes dibujos, a mi me gustan mucho los juguetes antiguos, te trasladan a la niñez, y también me gustan tus comentarios, hoy me he sentido identificada con el niño de la colcha, porque yo también pasé una temporada enferma y me aburría mucho, suerte de mis juguetes y sobretodo de mi album "Vida y color" un dia el farmaceutico, que ya sabes que antes venían a ponerte las inyecciones a casa, me trajo cien sobres de cromos y es algo que nunca olvidaré.
ResponderEliminarun abrazo.
Hola Joshemari:
ResponderEliminarMi padre era coleccionista (y creador) de soldaditos de plomo: Capell, Castresana, Palomeque, Schneider...los soldaditos con los que él jugaba de pequeño (años 30). Hay que ver el esfuerzo que llevaba el crear uno de esas miniaturas: se hacían una a una vertiendo el plomo fundido en los moldes, limando después, imprimando, pintando...no sé cómo eran rentables, de verdad. Mi hermano heredó esa colección, y yo la de pliegos de soldados de papel que son una maravilla (había auténticos artistas haciéndolos).
Los que has dibujado son: Napoleón, obviamente, infantería francesa de línea (1808), y un trompeta de coraceros, también francés (1808). Son todos del periodo napoleónico.
Napoleón me encanta como te ha quedado. Los otros hay algo que me desencaja: yo creo que es el punto de vista, aunque realmente los solemos ver a esa altura y con esa perspectiva...
Gracias Cinta, también me emociona esa historia que me cuentas! Qué bellos momentos!! Guardas los cromitos?
ResponderEliminarTodas esas cosas, a medida que el tiempo pasa, van dejando esos "posos" de recuerdos, que pueden alegrarte, una vez has apartado los malos, a llevar una vida algo más placentera.
A mi, al menos, me gusta recordarlos y en este caso, al exteriorizarlos, noto que otros, van recogiendo esos mensajes...
No sé si me he explicado bien, pero ya me entenderéis.
Un fuerte abrazo
Tayete, bueno, bueno bueno...
ResponderEliminarNo sabes la ilusión que me has dado con tu respuesta e información de lo que representan cada soldado! Fabuloso!!!!!
Yo no los compro por coleccionarlos, los compro porque soy visitante de brocanterías y cuando veo uno a precio razonable y que me guste, lo compro.
Qué bonita historia de tu padre!! Genial!
Fíjate el trabajo que cada pieza de esas llevaba... suerte que la mano de obra no valía nada! eran unos artesanos, artistas como la copa de un pino!
Resulta que sin querer, tengo unos soldaditos de la época napoleónica... vaya y eso debe ser porque algunos de ellos están comprados en Francia. Allí, a veces encuentras estas y otras cosas a precios razonables en esas ferias de pueblos, brocantes y vide-greniers (vacía-desvanes) que yo frecuento.
Menuda suerte tiene tu hermano de haberse quedado con la colección de tu padre, aunque los pliegos que tienes también deben ser una joya. Porqué no dibujas alguno? y lo pasamos bien?
Me ha hecho ilusión tu escrito y toda esa carga de información.
Sobre los dibujos y su perspectiva, piensa que están hechos directamente, sin utilizar el lápiz y en un cuaderno. El que llamo "cuaderno de viajes".
Un fuerte abrazo
Noooo, cuando me refería a que son de la época napoleónica es al modelo que representan, uniformes de las guerras napoleónicas. Las figuras supongo que son de los años 60 del siglo pasado (si tienes interés y las haces una foto, más o menos te las ubico) en que hubo un resurgir del coleccionismo de soldados.
ResponderEliminarPero tienen pinta de estar estupendas...
Gracias Tayete, te he entendido perfectamente.
ResponderEliminarMiraré de hacerles alguna foto y te las envío.
Bonito y dulce poema Joshemari. Realmente la imaginación lo puede todo.
ResponderEliminarMe alegro, al menos, con el poema te hayan entrado estos soldaditos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Joshemari, admiro tu arte por sí mismo y por la capacidad de producir un sentimiento de nostalgia de la infancia. Nunca jugué con soldaditos de plomo, aunque sí con otros muñequitos algo más modernos. Hablando de soldaditos de plomo, te dejo con este enlace de la música de Shostakovich, una auténtica delicia: http://www.youtube.com/watch?v=_TjKAENb85o
ResponderEliminarUn abrazo.
Muy bonito poema , y bien acompañado por tus soldados de plomo , que como comentas nadie deja nunca de tener el niño que todos tenemos dentro y alguno de nosotros seguro que prefiriamos algun dia jugar en la colcha con los soldaditos que la rutina de otro dia de trabajo , un saludo .
ResponderEliminarHOLA JOSHEMARI, ME HA CONMOVIDO EL POEMA DEL PAIS DE LA COLCHA Y TUS BOCETOS SIEMPRE TAN PERSONALES.
ResponderEliminarNO DEBEMOS OLVIDAR NUNCA EL FELIZ TIEMPO DE LA NIÑEZ. UN ABRAZO.
Super beau! Celui à cheval est saisissant!
ResponderEliminarHola Manel, gracias por gustarte ese juego de la nostalgia y que tú, a pesar de tu juventud, también tienes tu rinconcito nostálgico. Ahora es muy tarde, porque he tenido un día muy ajetreado (tengo que preparar la entrada de hoy, miércoles) pero este fin de semana, escucharé lo que me has propuesto. Ya te diré algo. Gracias.
ResponderEliminarUn abrazo.
Karlitos, claro que nos gustaría jugar a todos con la colcha y soldaditos... pero hay que dejarlo para los soñadores, enfermos o jubilados... o los que tienen algo de niño todavía.
Tú debes tener algo de eso. Verdad? y yo soy un semi-jubilado y con un montón de "niño".
Gracias por tu comentario. Un abrazo.
Amigo Juan, gracias y seguiremos conservando ese niño que llevamos dentro. Es muy importante!! Ayuda a vivir!!
Un abrazo.
Merci beaucoup, Cathy
ResponderEliminarSalut.
Muy bonita entrada Joshemari, la he disfrutado mucho. Tanto los soldaditos que tan primorosamente has pintado, como la bellísima ilustración y el poema, me han trasladado también a mi infancia, algunos periodos en cama donde tenía a mano mis recortables y otros juguetes y lo pasaba de maravilla.
ResponderEliminarGracias por este derroche de sensibilidad y belleza.
Un abrazo
Hola Carmen, me da mucha alegría el haber conseguido a través de los soldaditos de plomo, hacer recuperar tantos recuerdos a tanta gente. Se lo debo también a Suzanne. Considero muy hermoso todo ello, a pesar que fueron momentos de cama. Afortunadamente todos los que me escribís, estáis hoy sanos y queda en anécdota de dulce recuerdo.
ResponderEliminarUn abrazo.